El hallazgo se ha dado a conocer este miércoles después de más de dos años y medio de trabajo que ha permitido la reconstrucción de un cráneo de este nuevo dinosaurio.
Investigadores de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis han identificado un nuevo dinosaurio entre los más de 5.000 huesos encontrados en un yacimiento en la mina de carbón a cielo abierto de Ariño, en Teruel.

El hallazgo se ha dado a conocer este miércoles después de más de dos años y medio de trabajo que ha permitido la reconstrucción de un cráneo de este nuevo dinosaurio, del que se han encontrado hasta seis individuos distintos.

La característica principal de este nuevo ejemplar es su pico afilado y de ramas que divergen, en forma de buque, frente a los de los dinosaurios conocidos que es recto, según ha explicado el director de la Fundación, Luis Alcalá, durante la presentación de los restos.

Alcalá ha destacado la importancia de este yacimiento, en el que han hallado 348 huesos de hasta seis dinosaurios, que pueden permitir la reconstrucción casi completa de un individuo.

Según el científico de momento solo se ha restaurado el 16% de los materiales por lo que están «en el punto cero de un proyecto espectacular que permitirá definir estos dinosaurios como en ningún otro sitio», ha resaltado.

Los investigadores fechan estos restos hace 111 millones de años y tras las primeras investigaciones saben que se trata de un dinosaurio ornitópodo que medía entre 7,5 y 8 metros, comía plantas y su pariente más cercano sería el Iguanodon.

El nombre de este ejemplar se dará a conocer en una publicación científica posterior, ha avanzado Alcalá, aunque los trabajos realizados hasta ahora ya se han publicado en la revista científica Geoheritage, donde el artículo duplica el récord histórico de descargas de la publicación.

El yacimiento es especialmente importante, ha resaltado el responsable de la Fundación, porque se sitúa en el piso Albiense del Cretácito Inferior, una edad geológica en la que el hallazgo de dinosaurios es muy escaso en Europa.

En el yacimiento se han encontrado además fósiles de tortugas y cocodrilos, así como otros tipos de dinosaurios, y restos de plantas, invertebrados, ámbar, organismos microscópicos, hongos y bacterias.

Los investigadores han identificado hasta 97 puntos con huesos en una superficie de 15 hectáreas, justo donde termina la explotación de la mina de lignito a cielo abierto Santa María, del Grupo SAMCA.

El nivel estratigráfico que contiene los fósiles coincide con el muro de la explotación minera, es decir, el lugar donde se paralizan los trabajos de extracción y los investigadores confían en que los hallazgos podrían incrementarse en el futuro, dada la extensión de la explotación.

Alcalá ha destacado especialmente la colaboración con los responsables de la empresa que explota la mina, que ha aportado los medios para facilitar las excavaciones, como ha explicado el administrador del Grupo en Ariño, Pedro Alcaine.

Según Alcaine, fueron los geólogos los que durante las prospecciones de la mina, a 150 metros de profundidad, «vieron que había algo», y desde entonces los investigadores de Dinópolis excavan en la zona con la ayuda de los responsables de la mina.

A la presentación también han asistido los consejeros del Gobierno de Aragón de Industria e Innovación y de Educación, Cultura y Deporte, Arturo Aliaga y Dolores Serrat, respectivamente, quienes han destacado la importancia de la investigación para el desarrollo de la provincia.

«La investigación nos ha traídos visitantes y los visitantes recursos con los que se crea empleo y se fomenta la investigación. La rueda no debe parar», ha dicho Aliaga.

Para Serrat, el trabajo de la Fundación es un ejemplo de que «en un momento en el que los recursos escasean y las demandas aumentan, se puede hacer más con menos».

Ariño es un municipio que vive fundamentalmente de la extracción de carbón, y cuyos habitantes se han mostrado muy activos en las protestas de los últimos meses para pedir la continuidad de las ayudas al carbón.

El alcalde de la localidad, Joaquín Noé, se ha mostrado hoy contento por el descubrimiento, que puede atraer visitantes a la zona junto a otros atractivos como el futuro balneario o el Parque Cultural del Río Martín.

«Es un ejemplo de que la conservación del patrimonio y la minería se pueden complementar», ha destacado.

Fuente: Heraldo

Fecha: 28/11/2012