Los trabajos de excavación arqueológica con motivo de la primera fase del Plan Director del Castillo de Peracense en el despoblado de Los Casares, siglo XII. situado en el exterior de la fortaleza medieval, están permitiendo descubrir de forma íntegra los restos de la primera iglesia de Peracense. Los trabajos de excavación han descubierto una pila bautismal tallada en un solo bloque de piedra de rodeno, la conservación de un pavimento empedrado, restos del altar mayor y banco perimetrales. La actuación que se lleva en el castillo de Peracense la promueve el Departamento de Vertebración del Territorio que se financia a través del Fondo de Inversiones de Teruel.

El director de las excavaciones arqueológicas en el castillo de Peracense, de la empresa Acrótera Gestión del Patrimonio, Antonio Hernández Pardos, explicó que los trabajos forman parte de la ejecución de la primera fase del Plan Director del Castillo de Peracense, que incluye, entre otras actuaciones, una excavación arqueológica en el despoblado de Los Casares, que está situado en el exterior de la fortaleza medieval.

Los trabajos coordinados desde la Dirección General de Vivienda y Rehabilitación a través de Suelo y Vivienda de Aragón empezaron hace tres semanas y están permitiendo confirmar la antigua iglesia de Peracense donde se ha encontrado una gran pila bautismal. “La pila bautismal está tallada en un solo bloque de piedra de rodeno y se conserva en el emplazamiento original, un pavimento empedrado con cantos de roca de Rodeno, restos de una cancela, restos del altar mayor y los bancos perimetrales para los fieles”, reseñó Antonio Hernández.

La antigua iglesia parroquial medieval, siglo XII,  comentó Hernández, es un edificio de unos 65 metros cuadrados que pervivió como ermita de la Virgen de la Villeta hasta inicios del siglo XIX, que fue destruida en el contexto de la Primera Guerra Carlista. “El castillo de Peracense estuvo ocupado por las tropas liberales”.

El director de las excavaciones arqueológicas expuso que Los Casares es el antiguo emplazamiento de la actual localidad de Peracense, aldea que surgió a finales del siglo XII y que se estima se abandonó en la primera mitad del siglo XIV. Está situado a los pies del castillo de Peracense y todavía se conserva una poterna en la muralla del castillo para facilitar la comunicación entre la aldea y el castillo.

Trabajos arqueológicos para que Los Casares sean visitables 

El arqueólogo y director de las excavaciones que se están ejecutando en el exterior del castillo de Peracense, Antonio Hernández Pardos, manifestó que se seguirá trabajando en el entorno de la antigua iglesia de Los Casares y que el objetivo es conseguir la conservación de los restos que se van descubriendo para luego hacerlos visitables y ofrecer un aliciente más a los turistas que visitan la emblemática fortaleza de Peracense y que el año pasado alcanzó la cifra de los 23.000 visitantes.  En esta misma línea, con las obras del de la primera fase del Plan Director del castillo de Peracense se está ejecutando por la empresa adjudicataria por parte de Suelo y Vivienda de Aragón,  Construcciones San Roque Layunta, un camino desde la población a la fortaleza para disfrutar también del entorno natural en el que está el castillo.

Noticia y Foto: Diario de Teruel